El verdadero enemígo y al que tienes que temer y observar "no" está fuera de ti. Está en tí.
Si puedes por un momento enfocarte en tus pensamientos y observarlos con detenimiento, verás que los desarrollas tu y no al que tienes enfrente, miras y temes.
Cuando condenas y juzgas, estás dirigiendo una oleada de energía muy tóxica, que luego al emitir se queda enganchada en el campo electromagnético del cuerpo biológico, mental y emocional própio.
Entonces es como una sombra que se queda contigo morando y vibrando del mismo modo que vibraba al irradiar ese odio, o cualquier emoción negativa. Y al vibrar "con odio" en el momento de juzgar o criticar, solo se puede "atraer" esa misma vibración de odio hacia tí. Y esto te lleva hacia personajes que odias, y hasta que no seas consciente de lo que tu emites o das, esa sombra la tendrás siempre encima, recordándote que estás repitiendo el mismo patrón de comportamiento una y otra vez, porque no eres capaz de mirar más allá de lo normalmente estructurado y cotidiano.
Y cada vez que nos recuerdan y no entendemos, o no nos paramos a pensar y a preguntarnos, seguiremos dormidos. Cada vez más limitados, creyéndonos siempre muy en serio la vida, y eso, nos va destruyendo fisica y mentalmente.
En cuanto te encuentras con alguien que rechazas por algún motivo, te molesta su manera de ser, su manera de vestir, como habla, o si es egoísta, o envidioso, etc ...primero intenta acordarte y pararte a ver y observar, porqué rechazas esa emoción y sientela en tí. Cualquier tipo de rechazo de los demás, intenta observarte y verás que tiene relacion contigo, de manera directa o indirectamente. Y si dejas soltar todas las sensaciones y emociones, dejas que fluyan sin miedo y sin interrupciones estarás dando paso a un nuevo salto de nivel de vida.
Porque reconocer un error en tí, es algo muy difícil de lograr y cuando se consigue liberar toda esa energía negativa que estaba acumulada dando paso a que el organismo y nuestra mente se sane y cure. Todo se aclara en la mente, gozamos de mejor salud, y con más vitalidad, nuestros sentidos se agudizan más, y vemos la vida con ojos nuevos, casi literalmente. Y nuestro cuerpo nos obsequia con un mejor aspecto dando la bienvenida a la Autoestima.
Y si nos percatamos que cada vez que nos quejamos, criticamos, culpamos, juzgamos a los demás ... nos volvemos a sumergir en la misma película de siempre, las mismas cosas, las mismas personas que odias, etc ... si nos damos cuenta de este círculo y estamos cansados ya, optaremos por no gastar tanta energía, además mal canalizada, y la podremos reservar para situaciones más beneficiosas para nosotros. Y para atraer el tipo de vida que realmente en el fondo de nosotros deseamos. Esto se consigue con la práctica constante a la hora de poner la atención y el enfoque en nuestro instante diario, siendo consciente en cada momento, y sentir y disfrutar cada tacto, olores, belleza. No se trata de rechazar lo que no nos gusta tampoco, pero siempre admirando, disfrutando, no tomar tan en serio las cosas. Y cualquier error que tengamos, pues aceptarlos, porque normalmente los errores suelen ser de caracter emocional, y dandonos cuenta de esto, los liberamos con más facilidad.
Agradeces por tu liberación de esa emoción, y fluye de manera sincrónica con todos los elementos que te rodea (Aprende a observarlos con buen humor. Acostumbrate a agradecer, a valorar las cosas y a tí mism@). Sean agradables o no. Las cosas buenas y agradables deberíamos disfrutarlas, y los no tan buenos, pues intentar ver con paciencia los fallos, aprender de ellos y sobre todo para no volverlos a repetir o saber que las cosas que no nos gustan de los demás con no repetirlas nosotros pues ya estaremos aprendiendo algo de lo negativo, y comprometernos con nosotros.
Esto se puede lograr de manera suave y consciente (Para no tener que contener tanta tensión en el cuerpo) para que tengamos más salud, felicidad, más paz y el camino se torne más claro. Y sobre todo para la Autoestima.
Aprende a quererte y a querer a todo cuanto te rodea.
S.E.A
Si puedes por un momento enfocarte en tus pensamientos y observarlos con detenimiento, verás que los desarrollas tu y no al que tienes enfrente, miras y temes.
Cuando condenas y juzgas, estás dirigiendo una oleada de energía muy tóxica, que luego al emitir se queda enganchada en el campo electromagnético del cuerpo biológico, mental y emocional própio.
Entonces es como una sombra que se queda contigo morando y vibrando del mismo modo que vibraba al irradiar ese odio, o cualquier emoción negativa. Y al vibrar "con odio" en el momento de juzgar o criticar, solo se puede "atraer" esa misma vibración de odio hacia tí. Y esto te lleva hacia personajes que odias, y hasta que no seas consciente de lo que tu emites o das, esa sombra la tendrás siempre encima, recordándote que estás repitiendo el mismo patrón de comportamiento una y otra vez, porque no eres capaz de mirar más allá de lo normalmente estructurado y cotidiano.
Y cada vez que nos recuerdan y no entendemos, o no nos paramos a pensar y a preguntarnos, seguiremos dormidos. Cada vez más limitados, creyéndonos siempre muy en serio la vida, y eso, nos va destruyendo fisica y mentalmente.
En cuanto te encuentras con alguien que rechazas por algún motivo, te molesta su manera de ser, su manera de vestir, como habla, o si es egoísta, o envidioso, etc ...primero intenta acordarte y pararte a ver y observar, porqué rechazas esa emoción y sientela en tí. Cualquier tipo de rechazo de los demás, intenta observarte y verás que tiene relacion contigo, de manera directa o indirectamente. Y si dejas soltar todas las sensaciones y emociones, dejas que fluyan sin miedo y sin interrupciones estarás dando paso a un nuevo salto de nivel de vida.
Porque reconocer un error en tí, es algo muy difícil de lograr y cuando se consigue liberar toda esa energía negativa que estaba acumulada dando paso a que el organismo y nuestra mente se sane y cure. Todo se aclara en la mente, gozamos de mejor salud, y con más vitalidad, nuestros sentidos se agudizan más, y vemos la vida con ojos nuevos, casi literalmente. Y nuestro cuerpo nos obsequia con un mejor aspecto dando la bienvenida a la Autoestima.
Y si nos percatamos que cada vez que nos quejamos, criticamos, culpamos, juzgamos a los demás ... nos volvemos a sumergir en la misma película de siempre, las mismas cosas, las mismas personas que odias, etc ... si nos damos cuenta de este círculo y estamos cansados ya, optaremos por no gastar tanta energía, además mal canalizada, y la podremos reservar para situaciones más beneficiosas para nosotros. Y para atraer el tipo de vida que realmente en el fondo de nosotros deseamos. Esto se consigue con la práctica constante a la hora de poner la atención y el enfoque en nuestro instante diario, siendo consciente en cada momento, y sentir y disfrutar cada tacto, olores, belleza. No se trata de rechazar lo que no nos gusta tampoco, pero siempre admirando, disfrutando, no tomar tan en serio las cosas. Y cualquier error que tengamos, pues aceptarlos, porque normalmente los errores suelen ser de caracter emocional, y dandonos cuenta de esto, los liberamos con más facilidad.
Agradeces por tu liberación de esa emoción, y fluye de manera sincrónica con todos los elementos que te rodea (Aprende a observarlos con buen humor. Acostumbrate a agradecer, a valorar las cosas y a tí mism@). Sean agradables o no. Las cosas buenas y agradables deberíamos disfrutarlas, y los no tan buenos, pues intentar ver con paciencia los fallos, aprender de ellos y sobre todo para no volverlos a repetir o saber que las cosas que no nos gustan de los demás con no repetirlas nosotros pues ya estaremos aprendiendo algo de lo negativo, y comprometernos con nosotros.
Esto se puede lograr de manera suave y consciente (Para no tener que contener tanta tensión en el cuerpo) para que tengamos más salud, felicidad, más paz y el camino se torne más claro. Y sobre todo para la Autoestima.
Aprende a quererte y a querer a todo cuanto te rodea.
S.E.A
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